3 de julio de 2009

Elogio de lo pequeño

¿Por qué todo lo que hoy se necesita o se valora como bueno tiene que ser altius, citius, fortius?
¿A dónde nos dirigimos si para que la economía funcione todo tiene que crecer?

Los gedanken de Paburou de estos últimos meses giran mucho en torno a estos temas. La sociedad occidentalizada presuntamente civilizada vive en una continua ansiedad por conseguir siempre más, sin encontrar nunca un poco de satisfacción en las cosas más sencillas que tenemos a nuestro alrededor. Nos hemos olvidado de donde venimos y creo que no sabemos adonde vamos...

Estoy leyendo "Una nueva economía para vivir mejor" un libro que tenía pendiente de hace mucho tiempo, escrito por una persona muy querida y cercana, Juan Bautista Astigarraga y Goitia. El libro fue editado en 1988 en plena fase de instauración del neoliberalismo, cuyas consecuencias ahora sufrimos. A lo largo de las siguientes semanas recogeré citas de este libro. Para hoy un apartado que habla sobre el gigantismo:

"Lo grande es bueno" es una lógica consecuencia de la obsesión por el crecicimiento. [...] Así hoy las principales productoras de desempleo son las grandes empresas, mientras las pequeñas son las princpales creadoras del mismo. No obstante, las grandes empresas, gracias a su gran poder, siguen manieniendo sus privilegios y convencen a los poderes públicos para que subvencionens sus pérdidas [...] Y lo mismo pasa a nivel del Estado y demás entidades públicas donde [...] el costo de la coordinación y el mantenimiento de la burocracia supera claramente los beneficios recibidos en forma de servicios interesantes para los ciudadanos. Es necesaria la descentralización, la autogestión, "que no haga el mayor lo que puede resolver el menor". Es excesivo el poder que delegamos en nuestros representantes políticos.

La política no participada será cada vez más repudiada. De no ser así, los actuales Estados se irán desarticulando, como ocurrió en el Imperio Romano y en todos los imperios cuando dejaron de ser útiles.


¿No suena todo esto actual? Yo pienso que nos encontramos en un nivel de decadencia como el del Imperio Romano del siglo IV. Hasta que finalmente se le dió por terminado, llegó el año 476 (en la época de Boecio)... El proceso del final de la era industrial va a ser largo. Igual no lo llegamos a vivir... o igual, si seguimos destruyendo el medioambiente, a nuestra "ama lur", entonces no tendremos más remedio que acelerar el cambio hacia una "reconciliación de la economía y la tecnología con la naturaleza y el hombre" (subtítulo del libro de Juan B.).

Por todo ello, empecemos por disfrutar de lo pequeño y dejemos lo grande atrás.

Otro libro en sintonía con todo esto: "El elogio de la sombra" (陰翳礼讃) de Junichiro Tanizaki. Mi madre me lo regaló hace ya unos cuantos años y espero poder releerlo en breve, ahora que voy entendiendo poco a poco más cosas de la vida y filosofías japonesas.

¡Ah! Finalmente un fuerte abrazo a Jontxu (y su siempre tremendo...), mi amigo mexicano-gasteiztarra. Gracias por leerme, echo en falta nuestras reuniones. Y tranquilo Jontxu, que no cambiamos tan fácil ;-)

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